Me doy cuenta que en el transcurso de nuestras vidas, nos topamos con callejones sin salida, cometemos infinidad de errores, existen ciclos que hay que terminar, que hay laberintos sin resolver, situaciones que nos hacen dudar, tantas esperas, miles de retornos y sobre todo un camino por continuar.
Y conforme pasa el tiempo nos damos cuenta que conocemos personas que se vuelven parte del camino, pero no la terminal; amores que van subiendo y bajando de nuestro tren de vida, algunos amores que solo nos dan aprendizajes, que agradeces al final que sólo fueron pasajeros que abordaron, pero no llegaron a la estación final.
Pero pienso que todas esas personas que pasan por nuestra vida, al irse nos motivan; para ser mejores, para esforzarnos, para aprender, madurar, recapacitar, enmendar, dialogar, pensar, y sobre todo para conocer nuestras fortalezas y debilidades.
Aunque creo que lo importante es quedarnos con los buenos momentos y los gratos recuerdos; que dejemos a un lado las cosas negativas de cada pasajero que desocupó nuestro vagón. Agradezcamos por lo que un día fue y hoy ya no es, hay que estar conscientes que todo lo que pasa en nuestra vida es por alguna razón.
¡Bien dicen que las mejores cosas llegan al final, así sin esperar, sin pensar y sin aviso! Sólo hay que estar abiertos a aceptarlo.
Es más que obvio que en temas amorosos, uno nunca sabe el camino que tomará alguna relación. Pero porqué cerrarnos a nuevas oportunidades, a nuevos pasajeros y nuevos viajes. Cada amor es diferente, solo hay que continuar sin dudas, ni miedos, sin remordimientos ni pretextos. Ante una nueva oportunidad tenemos la posibilidad en nuestras manos de hacer las cosas mejor, de no cometer el mismo error, de reinventarnos, de conocernos y sobre todo, tener la seguridad de lo que queremos, cómo lo queremos y que hacer para lograrlo.
Leí por ahí una frase que dice: “El fracaso es una oportunidad para empezar otra vez con más inteligencia” (Henry Ford). Siempre hay que agradecer a todas esas personas que se cruzaron en nuestros caminos, que bajaron del tren de nuestra vida, pero que gracias a que ya no están, vienen mejores oportunidades, mejores esperanzas, sueños, promesas, compromisos que valen la pena vivir aunque sea de nuevo por instantes y “Si el amor es de instantes, tratemos de disfrutar cada momento”.
Los invito a leerme en el Diario Digital e Impreso EXTRA de La Laguna y en mi página de Facebook: Estrellas en el Cielo (Escritor)